martes, mayo 25, 2010

Votar a Conciencia

Adriana Vallejo de la Pava
La Tarde, martes 25 de mayo de 2010

El próximo domingo son las elecciones para elegir el nuevo presidente de la república. Sería un avance para la democracia colombiana lograr una alta participación de los ciudadanos. La apatía y la indiferencia se han expresado hasta ahora en el país a través de los altos niveles de abstención electoral. En promedio, en los últimos 50 años, la abstención ha estado cerca del 50 por ciento, es decir, la mitad de la gente, que puede votar, no lo ha hecho.

En el país, 30 millones de colombianos están habilitados para votar. Para estas elecciones se espera una alta participación de los jóvenes que van a votar por primera vez, ese ejercicio los vincula a ser parte de la discusión y de la solución de los problemas del país donde viven. Sería un logro para la democracia y un mensaje para los que no votan, que la mayoría de los colombianos salieran a participar en las decisiones que afectan su futuro y el de sus familias.

Colombia tiene unos candidatos serios, con programas de gobierno bien estructurados, unos mejores que otros como el de Germán Vargas Lleras, pero en general soportados. Los partidos realizaron sus consultas internas, la izquierda democrática ha tenido una excelente representación con Gustavo Petro. Una mujer, Nohemí Sanín, hace parte del abanico de candidatos presidenciales, un hecho meritorio en un país machista, donde la severidad de las críticas es siempre mayor hacia las mujeres. Hay candidatos con gran experiencia y hay nuevas opciones para la política nacional, que se analizarán en otra columna.

Los candidatos han podido hacer campaña por todo el territorio nacional, gracias a la seguridad democrática que ha garantizado el Presidente Uribe. Como lo recuerda la revista Semana, en el país, en una sola campaña presidencial, mataron tres candidatos. Antes, en unos pueblos la guerrilla contralaba las elecciones y en otros lo hacían los paramilitares. Los carros bomba, las pescas milagrosas y la toma de pueblos por parte de la guerrilla hacían parte del día a día en los pasados procesos electorales.

Los ciudadanos tienen hoy disponibles los programas de gobierno de los candidatos, los han escuchado en los debates y saben lo que representan. Las encuestas no pueden convertirse en la primera vuelta presidencial, el voto debe ser un ejercicio a conciencia. Cada persona puede ejercer su derecho indelegable al voto, analizar lo que es mejor para el país y votar libre e independientemente.


martes, mayo 18, 2010

40.000 familias, el costo de una mala negociación

Adriana Vallejo de la Pava
La Tarde, martes 18 de mayo de 2010

Las negociaciones del TLC con Europa no midieron el impacto negativo que tendrá el tratado en el sector productor de leche. Las futuras importaciones de leche le pueden dar la estocada final a un sector caracterizado por tener bajos márgenes de rentabilidad. Se estima que para el año 2011 el país tendrá, como consecuencia de la entrada de leche europea, una oferta adicional de 18.000 toneladas de leche en polvo y 8.000 toneladas de queso, que equivalen a 280 millones de litros de leche líquida. La sobre oferta impactará inmediatamente los precios de la leche, es decir, las ventas de los pequeños ganaderos. El año pasado con un inventario menor, al que tendremos en el 2011, el precio de la leche, que pagan a los ganaderos, cayó más de un 14 por ciento.

El sector agropecuario colombiano es vulnerable y no retardatario como lo califica su mayor crítico, Rudolf Hommes. El sector rural es un asunto público y no privado. En los tratados de libre comercio el sector agropecuario es vulnerable no por sus propias condiciones de productividad, sino por las condiciones de los países con los que tiene que competir. Europa cuenta con sistemas de subsidios y apoyos internos al sector productor de leche, que no tiene Colombia. La Organización Mundial de Comercio no ha podido garantizar un comercio justo de productos agropecuarios.

Lo que deberían hacer los críticos del sector agropecuario colombiano es conocer porque producen otros países alimentos más baratos, con seguridad encontrarán una gran variedad de causas: desde los grandes subsidios que les otorga el Estado, hasta las economías de escala de las grandes extensiones, pasando por los costos de la nómina, los impuestos locales, los costos de los fletes, la revaluación del peso, llegando a encontrar grandes diferencias en los montos invertidos en investigación y desarrollo tecnológico aplicados al sector agropecuario.

El sector productor de leche en el país está conformado por pequeños ganaderos, 400.000 productores con menos de 50 cabezas de ganado en promedio. La transformación de la leche está concentrada en cinco empresas, que son los únicos que compran a los ganaderos su leche. Las importaciones bajarán la producción de las empresas transformadoras de leche y productos lácteos y los pequeños ganaderos de leche no tendrán a quien venderle o lo que tengan, tendrán que ofrecerlo a un precio muy bajo por la sobreoferta en el mercado nacional. Si las medidas que tome el gobierno no son suficientes, se afectarán más de 40.000 familias que viven de la leche.

martes, mayo 11, 2010

¿Cuál es el Debate?

Adriana Vallejo de la Pava
La Tarde, martes 11 de mayo de 2010

La coyuntura socioeconómica, manifestada principalmente en el aumento del desempleo y en la crisis del sector salud, llevó a muchos a pensar que estos deberían ser los temas, alrededor de los cuales, girara el actual debate presidencial. Sin embargo, el tema de fondo es la institucionalidad democrática, las formas de acceso al poder y el manejo de la cosa pública.

Los medios de comunicación en los debates han insistido en poner sobre la mesa el tema de las relaciones internacionales, planteándoles a los candidatos situaciones hipotéticas que nada aportan a la comprensión de la estrategia de internacionalización del país, por el contrario, son inconvenientes y han servido de pretexto para que el presidente del vecino país intervenga, más de lo habitual, en el actual debate. La indebida intromisión en los asuntos internos no hay que incentivarla sino rechazarla.

Aunque los programas y las propuestas no son las que definen los ganadores de las elecciones, si son una oportunidad para reflexionar sobre los problemas del país y las alternativas de solución. En materia de empleo, en las pasadas elecciones al Congreso de la República, nosotros propusimos, entre otros, una revisión de los parafiscales para reducir los costos asociados a la nómina, que frenan la generación de empleo formal. Como fuente alternativa de recursos planteamos una juiciosa revisión de las exoneraciones tributarias. El país necesita una reforma fiscal estructural e integral.

Presentamos en los barrios el programa el “Sena va a la escuela” para articular desde el noveno grado la formación del Sena con la de educación secundaria, para lograr una mayor pertinencia y disminuir el desempleo juvenil. Propusimos la idea de los CONPES de empleo, diferenciados por regiones, para generar ambientes locales competitivos con planes a largo plazo e inversiones articuladas y coherentes, y una reforma al sistema financiero, para tener una banca cercana y responsable que permita un verdadero acceso al crédito para el sector urbano y rural.

Los temas, basados en estudios, como el de los parafiscales o la revisión del papel del Sena, han sido abordados en el actual debate presidencial, pero sorprende que no se toque el sistema financiero y no se planteen alternativas para articular las políticas públicas nacionales con el desarrollo local.

No obstante, lo fundamental se puso en discusión: la calidad de nuestras instituciones para adelantar los cambios en cualquier materia (educación, salud, empleo etc.) depende de la capacidad de quienes componen las instituciones y de los intereses que defiendan. Las formas de acceso al poder basadas en la compra de votos, el voto amarrado por contratos o prebendas, la subordinación de los intereses de los ciudadanos a los intereses privados o políticos, en general la politiquería, reflejada en las pasadas elecciones al Congreso de la República, destruye la confianza en lo público y sus instituciones.

martes, mayo 04, 2010

Más Pobreza y Desempleo en Pereira

Adriana Vallejo de la Pava
La Tarde, martes 4 de mayo de 2010

Los índices de pobreza e indigencia en Colombia registraron una leve disminución del año 2008 al año 2009, pasando, en el primer caso, del 46% al 45,5% y en el segundo, del 17,8% al 16,4%. Lo mismo ocurrió en materia de igualdad, medida a través del coeficiente de GINI, que refleja la mayor o menor concentración del ingreso. El coeficiente pasó del 0,589 en el 2008 al 0,578 en el 2009.

Las cifras siguen siendo altas, equivalen a aproximadamente 20 millones de personas pobres. Colombia es uno de los países del continente con mayor inequidad, sin embargo, al país no le fue tan mal en la crisis internacional. A pesar del bajo crecimiento del año pasado (sólo 0,4%), de la caída del 2% en los ingresos de los hogares y de un desempleo del 13%, la pobreza y la indigencia no aumentaron.

El problema está en las ciudades y en los efectos que tuvo la crisis en cada una de ellas, en el desequilibrio regional y local. En Pereira aumentó la pobreza pasando del 40,3% en el 2008 al 42,8% en el 2009. El porcentaje de indigentes también aumentó del 7,9% en el 2008 al 8,7% en el 2009.

Los índices de pobreza y de indigencia en Pereira son mayores a los registrados para el total de las 13 áreas metropolitanas. La pobreza en las 13 áreas metropolitanas de Colombia, en el 2009, fue de 30,6% y la indigencia fue de 7,1%, menores a las de Pereira.

Pereira registró una de las más altas incidencias de pobreza en Colombia, sólo fue superada por Manizales. La capital del departamento registró uno de los mayores incrementos en la pobreza del país (2.6 p.p.), después de Pasto (4.0 p.p.), entre el año 2008 y el año 2009.

Lo más crítico en el caso de Pereira es el aumento en la pobreza extrema o indigencia con respecto al año 2002. Mientras en el agregado de las 13 áreas metropolitanas, del año 2002 al año 2009, la pobreza extrema se redujo 2,3 p.p., en Pereira aumentó. El porcentaje de personas en condición de indigencia pasó del 7.1 en el año 2002 al 8.7 en el año 2009.

El ingreso de los hogares en Pereira se redujo en una mayor proporción, registró una caída del 4%, el doble de la nacional. La caída en el ingreso de los hogares obligó a muchos de sus miembros, que estaban inactivos, a salir a buscar empleo para compensar la disminución en los ingresos familiares. La tasa de desempleo en el 2009, fue mayor a la nacional y el Área Metropolitana de Pereira continúa en el primer lugar en desempleo de Colombia con una tasa del 22%.