viernes, febrero 12, 2016

Burocracia Atrapada


Para prosperar en un mundo más difícil y más competitivo, para atender temas como la prevención y atención del ZICA, la disminución del crimen o el aumento de la productividad es esencial que existan instituciones trabajando coordinadamente en todos los niveles de gobierno. La capacidad de esas instituciones en América Latina depende de la creación de una servicio público profesional independiente de la injerencia política.

La anterior es una de las principales conclusiones de un análisis publicado, el pasado 30 de enero, en la revista The Economist, el cual se basa, entre otros, en dos estudios: uno realizado por la CAF (Corporación Andina de Fomento) y el otro por el BID sobre el servicio público o civil en América Latina.

Los esfuerzos en la región por mejorar las políticas públicas se truncan por un servicio público politizado y obsoleto. La ineficiencia burocrática es una fuente cada vez mayor de insatisfacción de la creciente clase media que espera instituciones más eficientes y menos corruptas.

Los servidores públicos en América Latina sufren por el exceso de procesos y procedimientos y por la falta de una estructura administrativa clara. Los organismos de control son incapaces de frenar la corrupción pero si de condenar funcionarios por falta de cumplimiento de innecesarios trámites administrativos.

El pecado dominante, según The Economist, es la politización que se refleja en vinculaciones a las instituciones por lealtades políticas y no por méritos, despidos masivos por cambios de gobiernos, incluyendo servidores competentes. Por amiguismo los cargos bajos tienen mayor remuneración en el sector público que en el privado, contrario a lo que ocurre con los cargos altos (CAF).

Los intentos en America Latina por transformar el servicio público son pocos, insuficientes o nulos. El país con mayores avances es Chile que aprobó en el año 2003 una ley para la selección de administradores públicos por mérito, bien remunerados y evaluados por resultados. Perú pasó una ley en el 2013 para cambiar la vinculación de 560.000 funcionarios a contratos profesionales por resultados, sin embargo, no la ha implementado. Varios países como Colombia han creado islas técnicas independientes como los Bancos Centrales.

En Colombia, al igual que en la mayoría de los países de América Latina, falta voluntad política para iniciar un proceso de desarrollo institucional de largo plazo con una carrera administrativa bien reglamentada que dignifique al servidor público, mejore la atención a los ciudadanos y genere las condiciones para enfrentar los grandes retos globales en materia social, económica y ambiental.


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